Seguimiento de productos mediante blogs
14 septiembre 2004
Manuel Almedia publica una entrada en su blog sobre Blogosfera vs mercado: bienvenidos al blog business, en la que trata la creciente relación entre los negocios y la blogosfera.
«La enorme potencialidad de una comunidad en la que participan de forma activa millones de personas en el mundo resulta una manzana demasiado tentadora. Las expectativas de mercado son enormes, sólo falta elaborar las estrategias precisas y diseñar las herramientas adecuadas. El principal hándicap al que se enfrentan los promotores del blog business es la propia indiosincrasia del sector, su independencia».
Creo que es una visión un tanto idealizada y simplificada. Han sido intereses empresariales los que han ayudado a crear la blogosfera: Blogger, Google, Userland y Six Apart son algunos ejemplos indispensables.
En todo caso, Manuel nos pone algunos ejemplos de creación de negocios utilizando los blogs.
«Me entero a través de The Blog Herald (que hace referencia a su vez a un artículo de Michael Bazeley en The Mercury News) que acaba de nacer un servicio que ofrece a las compañías un seguimiento de sus productos en la blogosfera. Una especie de programa espía que, sin nuestro consentimiento, chequea nuestras bitácoras e informa a las empresas sobre la opinión que tienen los autores de blogs o sus usuarios sobre la mercancía que ofertan. El creador de Blabble, que así se denomina el servicio es Matt Rice, quien no se corta un pelo a la hora de promocionar su invento: "We can see what words people are using to describe to products"»
Babble parece seguir los pasos de Technorati y DiceLaRed. En el primer caso, Technorati, el motor de indexación de blogs que sigue 4 millones de páginas, ofrece -previo pago, listas de vigilancia (watchlists) basadas en palabras y de esta forma tenemos datos en bruto sobre lo que puede estar diciendo la blogosfera sobre nuestros productos. Por otra parte, la española DiceLaRed hace un trabajo similar (y tenemos como ejemplos su barómetro de blogs) pero además, ofrece servicios de investigación del mercado, utilizando grupos de noticias, listas, páginas web y blogs. Babble haría lo mismo que DiceLaRed, pero de forma automatizada:
«Blabble is dedicated to making sense out of the seemingly endless supply of blog information. We feel there is tremendous power in understanding the thoughts and opinions of influential blog authors. To accomplish this, Blabble parses thousands of recently-changed blogs every few minutes and breaks the text into parts of speech. Our natural language software links those parts allowing us to group and analyze intended thoughts. None of our competitors come close to matching our language processing».
Mediante reconocimiento automatizado del lenguaje afirman poder reconocer si se habla bien o mal de un producto... afirmación un tanto extraordinaria, por cuanto el lenguaje suele ser muy sutil (no siempre una crítica equivale a un rechazo).
En todo caso, parece todo un filón por explotar.
La opinión en la Red de los usuarios -que son algo más que meros paganinis o consumidores- es algo que debiera preocupar más a las empresas. De hecho, La Vanguardia nos pone como ejemplo en Convención de blogs:
«Dar voz y no taparse los oídos. El ejemplo de Six Apart es ilustrativo. Esta empresa, que creó la herramienta de publicación online Movable Type, utiliza su foro de usuarios para resolver problemas y recibir comentarios. Hace unos meses anunció un cambio importante en su sistema de licencias. Los usuarios se encabritaron y a Six Apart le llovieron críticas desde blogs basados en su propio software. La compañía solicitó entonces a los usuarios aportaciones constructivas sobre el uso que hacían del programa y modificó las condiciones de las licencias, con el beneplácito de la mayoría de usuarios».